Se define a si mismo como pasión + comunicación = impacto.
¿Qué quién soy?
No soy fruto de viajes reveladores, ni de referentes vitales a seguir tan de moda actualmente. Soy resultado de las experiencias que me han marcado en mi vida, que me han hecho tomar decisiones importantes de manera habitual.
Desde pequeño, siempre he tenido claro que el mundo lo mueven las personas con pasión, los believers de que gracias a la comunicación otro mundo es posible, los followers del ser humano… los conocidos como seres emocionalmente motivados. Lo admito, soy uno de esos,
¿si no has venido a este mundo a darlo todo a qué has venido?
Como enfermero, mis 12 años en urgencias de un hospital significaron un máster en atención al cliente, asertividad y empatía intentando responder a las necesidades de la gente. Fueron años realmente inspiradores, tanto que marcaron mi futuro laboral. Entendí, que si las personas pasamos un 70% de la vida trabajando, conviviendo con compañeros, jefes que el azar caprichoso ha elegido para nosotros/as y un 62% de los trabajadores/as prefieren tener menor salario y mayor felicidad laboral sin conseguirlo, era ahí donde debía estar. Y así comenzó este camino.
20 años después, y a través del coaching y otras disciplinas, sigo acompañando a las organizaciones en su profundo proceso de transformación consciente y efectiva. A aquellas empresas, que no consideran suficiente el ser buenas, que quieren diferenciarse por lo que son y no por quienes son, las que apuestan por el activo que genera el desarrollo estructural sostenible en su interior, que me gusta llamar PIH (Producto Interior Humano) y no solo por los resultados del PIB (Producto Interior Bruto).
En esta nueva era digital, este entorno cambiante e incierto, donde caducamos a cada instante, donde se nos oxidan los sueños rápidamente, es donde mi objetivo de promover el bienestar laboral en las organizaciones adquiere su mayor sentido.
